Analizando las cifras de paro

Dos noticias de dos periódicos en formato digital... sin comentarios. 

Vamos a analizar lo que no cuentan los diarios electrónicos. Si bien es cierto que el número de parados "registrados" en las oficinas del servicio de empleo público se ha reducido en 127.248 personas, la cifra la sabrán bien porque es la única que no han parado de repetir, el mismo   informe establece que en términos desestacionalizados, es decir, sin tener en cuenta el efecto verano en este caso, el paro ha aumentado en 996 personas. El número de contratos registrados durante el mes de junio ha sido de 1.277.255, casi 110 mil contratos menos que el mismo mes del año 2012. De éstos tan sólo 87.349 contratos son indefinidos, casi un 50 % menos que en junio de 2012.

Relacionando las cifras de paro registrado con las cifras de afiliados, nos encontramos con que tan sólo 1 de cada 4-5 personas que han dejado de engrosar las listas del paro están reflejados en los datos de afiliación. Respecto a estos últimos según el informe de afiliados ocupados a la seguridad social de mismo ministerio, el número de cotizantes ha aumentado respecto al mes anterior en 26.853   personas, pero el dato desestacionalizado refleja una caída en el número de éstos en 7.324             personas. 

El gráfico de la izquierda refleja la variación anual de afiliados de junio/junio del periodo 2004-2013. Como pueden comprobar este año ha sido el segundo peor de los últimos diez años, sólo superado por el año 2009, cuando estábamos al inicio de la crisis. 

El número de afiliados medios del mes de junio son 16.393.866, mientras que la afiliación intradía a 28 de junio terminaba con 16.346.688.

Ahora el gráfico más importante. El número de afiliados medios del periodo enero/junio analizado desde el año 2002 hasta 2013.

El número medio de cotizantes de los primeros seis meses del año está por debajo de la cifra del año 2003, 600 mil menos que el año 2012 y 3 millones menos que el año 2007.

Con estos datos una cosa queda clara, que la excusa de la herencia recibida no se sostiene porque todos los datos han empeorado en el último año.